Los monotipos creados por Edgar Degas y el impacto que éstos tuvieron en su quehacer artístico son la trama de esta propuesta expositiva que reúne 120 de estas estampas experimentales, además de 60 piezas relacionadas, entre pinturas, dibujos, pasteles, cuadernos de bocetos y grabados. Figura destacada en el arte del siglo XIX, Degas es más conocido como pintor y cronista del ballet. Sin embargo, fue en su labor como grabador donde dio rienda suelta a su desbordante creatividad. En la década de 1870 el francés disfrutaba ideando técnicas originales en la soledad de su estudio y también compartiendo recetas para producir efectos no convencionales con sus colegas. Cautivado por el potencial del monotipo que le ofrecía una inesperada libertad, Degas llevó este medio a cimas inéditas y revolucionarias. [Edgar Degas, Bailarina en escena con bouquet]