La feria BRAFA tiene el gran honor de presentar a Christo (1935) como artista invitado. Es uno de los artistas contemporáneos más prestigiosos e influyentes que, junto a su esposa Jeanne-Claude (1935-2009), han formado un dúo inseparable que se dio a conocer por sus embalajes de monumentos históricos y sus instalaciones paisajísticas a gran escala. “No siempre envolvemos, también hacemos cortinas, rodeamos islas… No creamos mensajes ni símbolos, sólo arte. Si a la gente le gusta, estamos muy contentos. Nuestra intención es hacer una obra de arte de belleza y alegría, que no tenga ningún propósito”, dijo Jean-Claude en una conferencia en el MACBA de Barcelona en el año 2000, mientras Christo aseguraba que no ha estado vinculado al Nouveau Realisme: “el manifiesto no está firmado por Christo”. La obra escogida especialmente por Christo para BRAFA, Three Store Fronts (Tres escaparates,1965-66), es muy interesante, pues los cortinajes de tela colgados en el interior de las vitrinas de vidrio son el precedente de algunas de sus bellas, monumentales y carismáticas obras, como Valley Curtain, Running Fence o de The Gates. Esta escultura se expuso por primera vez en el museo municipal Van Abbe de Eindhoven, en Países Bajos y posteriormente formó parte de la exposición Christo y Jeanne-Claude: Obra Temprana, 1958-69 en el Martin-Gropius-Bau de Berlín en 2001.
En su Bulgaria natal, Christo vivió de pleno el Realismo socialista cuando los estudiantes de arte tenían que pintar los muros que escondían la pobreza, cuando el tren llegaba a la ciudad, mostrando imágenes de una vida próspera y alegre, lejos de toda realidad. Fue así como Christo integró en su vida la diferencia entre apariencia y realidad, que empezó dando forma a unas obras de las que solamente se vería el embalaje. Dejó su país en 1956 y llegó a París en 1958, donde conoció a Jeanne-Claude. En 1963, todavía en París, Christo había comenzado a realizar sus Show Cases (Vitrinas). Compraba pequeños expositores o botiquines de farmacia acristalados en los mercadillos y trastocaba su función colgando telas o pegando papel por detrás de los paneles de vidrio. En algunos casos iluminaba el interior de las vitrinas con una bombilla o sugería una lujosa decadencia forrando el interior con raso o seda. Además, los Show Cases, Show Windows y Store Fronts son las primeras obras que no incluyen embalajes. Las estructuras exteriores no están ocultas, sino que funcionan como esculturas independientes. Mientras que los objetos más pequeños predominaban a principios de los 1960, a partir de 1964 el interés de Christo y Jeanne-Claude se centró en alterar estancias y entornos en su integridad.