Del 23 de septiembre al 1 de octubre, la veterana Biennale Internazionale dell’Antiquariato di Firenze (BIAF) regresa al histórico Palazzo Corsini, que es su sede desde 1959. Los anticuarios italianos se han reservado para la cita sus mejores pinturas, muebles, tapices, estatuas y objetos de arte para cautivar al comprador más exigente. El stand de Tomasso Brothers Fine Art, por ejemplo, rendirá un homenaje a Florencia así que sólo presentarán trabajos de artistas de la ciudad. La pieza más especial es una placa en estuco, con restos de policromía, realizada por un joven Luca della Robbia, discípulo aventajado de Ghiberti, que se convertiría en uno de los emblemas del Renacimiento florentino. Este relieve de la Virgen con el Niño rodeados por un coro de ángeles, estuvo en la colección del gran filántropo americano JP Morgan.